Cerrar el grifo

 

Si además de instalar varios sistemas ahorradores, cambiamos pequeñas malas costumbres generalizadas en todos los hogares, conseguiremos maximizar el ahorro doméstico.
– Para empezar, es necesario disponer de un contador de agua individual al que se tenga acceso. En muchas comunidades de vecinos el gasto es comunitario y se reparte a partes iguales entre todos los vecinos, o los contadores individuales están situados en salas de difícil acceso.En Sevilla la instalación de contadores individuales a través del Plan 5 supuso la reducción del consumo doméstico en un 20%.
– Si va a construir o remodelar su vivienda, agrupe el baño y la cocina en un área para evitar largas líneas de tuberías, y aísle el calentador y las tuberías para mantener la temperatura del agua caliente durante más tiempo.
– El gasto de lavar la vajilla dos veces al día oscila entre los 120 litros si se hace a mano con el grifo abierto, los 60 litros si se utiliza la pila llena de agua y los 25 litros si se pone el lavaplatos una vez al día. Conviene poner la lavadora y el lavaplatos a plena carga; la tecla de media carga no es eficiente en el ahorro de agua en todas las máquinas y gasta igual de energía que en el programa normal.
– Lavar el coche con manguera supone un gasto de unos 500 litros. Con esponja y cubo, menos de 50 litros. En un tren de lavado, 75 litros, con la ventaja de que el agua sucia con detergentes no
acaba infiltrándose en el suelo.
– En el jardín y terraza se consume mucha agua. Ajuste el riego a calendarios y horarios con baja evaporación, ponga plantas autóctonas que consumen poca agua, utilice recubrimientos (corteza de
pino, viruta de madera…) para evitar las pérdidas de humedad del suelo.
– Si tiene una piscina, aunque sea portátil, ponga una depuradora para mantener el agua todo el verano.